Válvulas de ventosa para ahorrar energía
Las tuberías de conducción de agua llevan aire en su interior inevitablemente (entre un 5 y un 10%). Este aire puede aparecer tanto en conducciones gravitacionales como de bombeo. Aire que entra por los procesos de llenado y de vaciado de las tuberías o durante el funcionamiento diario de la red hidráulica, por interrupciones en el suministro, por fisuras en zonas de presión negativa, por los vórtices que se generan en la aspiración de las bombas o por roturas. Por ejemplo, en el caso de bombear desde un aljibe previamente llenado a cielo abierto, habría que tener en cuenta que se generan muchas burbujas de aire que luego son ingresadas en las conducciones por las bombas. Además, también una reductora de presión genera aire aguas abajo de la tubería.
Efectos por la presencia de aire en el interior de las conducciones de agua
El aire en las tuberías provoca:
- Importantes sobrepresiones que pueden reducir la sección de paso de la tubería (pudiendo incluso bloquear la tubería o romperla).
- Pérdidas de carga adicionales: disminución del caudal y aumento en el consumo de energía de las bombas.
- Ruidos y vibraciones en las conducciones.
- Problemas en los filtros.
- Aumento de la corrosión de las tuberías.
- Errores en las mediciones de los medidores de caudal al no medir exclusivamente agua.
Las válvulas de ventosa o válvulas de aire son la solución a estos problemas. Las válvulas de ventosa expulsan el aire interior de las tuberías cuando éstas se están llenando e introducen aire cuando se están vaciando.
Sin ventosas en las conducciones, las bombas trabajan a más revoluciones por minuto y tienen que elevar a más altura para mover la misma cantidad de agua, lo que genera más gasto de energía. Instalando ventosas se pueden reducir hasta un 25% los gastos energéticos.
Utilidad de las válvulas de ventosa
Aumentan la eficiencia del sistema de bombeo ahorrando energía, optimizando las operaciones de llenado y vaciado de las tuberías y mejorando la lectura de caudales en contadores y caudalímetros.
También protegen las instalaciones al prevenir presiones subatmosféricas ante roturas, vaciado de tuberías etc. Evitan golpes de ariete por un cierre dinámico o por la formación de bolsas de aire atrapado, reducen los posibles daños en equipos de medida, sistemas de filtración…
Además, las válvulas de ventosa aumentan la vida útil de las instalaciones ya que reducen la corrosión de las tuberías y evitan la entrada de patógenos.