Medidor de viento
La agricultura de precisión necesita aplicar nuevas tecnologías para poder aumentar la producción de las explotaciones reduciendo gastos fijos como el consumo de energía y los insumos.
El objetivo a cumplir es ser igual o más productivo con menos recursos y procurando una producción más sostenible.
Partiendo de los sensores conectados (humedad de suelo, temperatura, viento, ph…) y a través de aplicaciones sencillas e intuitivas, los agricultores tienen la posibilidad de acceder a todos los datos en tiempo real y tomar las decisiones adecuadas de forma inmediata.
Uno de los elementos que inciden directamente en las labores agrícolas es el viento.
El viento es una limitación bien conocida por los agricultores durante ciertas labores, como por ejemplo la aplicación de agua de riego a los cultivos. El viento tiene gran incidencia en el deterioro de los parámetros de calidad del riego ya que reduce el radio de alcance efectivo del aspersor y afecta también al porcentaje de solapamiento de un aspersor con otro. También influye en el grado de esparcimiento del fertilizante o en la pulverización de fitosanitarios.
Por ejemplo, los productos fitosanitarios empiezan a desviarse a partir de 15 km/h de viento. Además, está prohibido rociar o espolvorear estos productos cuando la velocidad del viento es superior a 19 km/h.
Por un lado, el desvío de estos productos es un problema medioambiental cuando llegan a zonas habitables. Por otro lado, los productos fitosanitarios representan uno de los principales costes de las explotaciones y esto puede generar costes financieros adicionales si se despilfarran.
Medidor de viento ultrasónico
Con anemómetros ultrasónicos, la medición del viento en la agricultura de precisión garantiza y permite pulverizar en el momento adecuado, en el lugar adecuado y la cantidad adecuada.
Este medidor de viento dispone de cuatro transductores ultrasónicos, tiene un tamaño reducido (43 mm de diámetro x 47 mm de alto) y es fácil de instalar. Facilita de forma fiable los datos de dirección y velocidad del viento mediante bluetooth para ser visualizados desde cualquier teléfono móvil y actuar en consecuencia. Algunos modelos pueden derivar los datos de dirección y de velocidad (metros/segundo o kilómetros/hora), mediante un cable con salida 0,1 a 20 Hz a un programador para que de forma automática, modifique los parámetros de aplicación según las circunstancias.
Tienen protección IP68 para garantizar su durabilidad en el exterior. Según los modelos, pueden instalarse fijos y constantemente alimentados (3,3 a 18 VDC) con un consumo de 0,3 mA, o utilizarlos como portátiles con alimentación solar propia o recargables (con cargador USB). Estos últimos tienen una autonomía de hasta un año en estado dormido o de 90 días con mediciones constantes.
Indican la dirección del viento en un rango de 0 a 359 grados con una desviación de +/- 1 grado.
La velocidad del viento la proporcionan en un rango de 0,5 a 45 metros por segundo con una desviación de 0,1 metros por segundo.