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Agricultura y Riego

Cultivo de cacahuete con riego Pivot

cultivo de cacahuete con riego Pivot

Los productores de cacahuete son conscientes de que la aplicación y la gestión del agua de riego es fundamental para obtener unos rendimientos altos. A menos que el cultivo reciba el agua adecuada y de manera oportuna, no serán competitivos en el mercado.
El cultivo de cacahuete suele requerir entre 41 y 76 centímetros de agua por temporada, aunque va a variar dependiendo de las temperaturas del aire y del suelo, la radiación y el viento.

Debido a las incertidumbres del clima, el productor necesita tener un suministro de agua y un equipo de riego Pivot, que le garantice disponibilidad de riego en las épocas más críticas del cultivo. Solo de esta manera podrá asegurar la germinación de las semillas y el crecimiento del cultivo, aplicar con el riego los nutrientes necesarios según las carencias del suelo, que las vainas y el cultivo en general maduren de forma uniforme, mejorar la absorción de nutrientes, reducir el estrés térmico, facilitar la cosecha con suelos que no estén excesivamente secos, reducir el nivel de aflatoxina en las vainas y los granos…

Requisitos hídricos del cultivo de cacahuete a lo largo de su ciclo de vida

Antes de la floración, los cacahuetes viven la llamada etapa de crecimiento vegetativo. La etapa reproductiva comienza en flor y continúa con el relleno de las vainas y la madurez. La necesidad de agua varia durante los distintos periodos de crecimiento y el riego resultará clave entre el éxito o fracaso económico.

Los herbicidas previos y los insecticidas necesitan en la siembra humedad para su activación. Un riego a tiempo mejorará la eficacia de estos productos y reducirá la necesidad de aplicaciones posteriores y de los gastos adicionales que ello conlleva.

El periodo de germinación es un momento crítico, las semillas deben absorber alrededor del 50% de su peso en agua para germinar correctamente.

El crecimiento vegetativo es lento en las primeras tres o cuatro semanas cuando la planta produce hojas y tallos. A medida que se producen más hojas y aumenta la fotosíntesis, el crecimiento se vuelve más rápido. El riego es el único método que garantiza los recursos hídricos durante este rápido período de crecimiento. Si se producen condiciones de sequía en esta etapa la fotosíntesis se ralentizará o detendrá y el crecimiento se verá gravemente afectado.

La importancia de las raíces en la absorción del agua

La absorción de agua por la planta se ve afectada por el agua disponible en el suelo y por el volumen de la masa radicular. Cuanto mayor sea el desarrollo de las raíces laterales y a más profundidad se encuentren, mayor será la capacidad de absorción. Los suelos arenosos habituales en el cultivo de cacahuete no retienen el agua como los suelos pesados, pero facilitan que las raíces profundicen, lo que no ocurre con los suelos pesados. La raíz del cacahuete profundiza hasta 2,8 metros en suelos arenosos, pero sólo 1,2 metros en suelos más pesados. El distanciamiento entre las plantas también influye en el desarrollo de las raíces y en la absorción de agua.

Es importante conocer el volumen de raíces a diferentes profundidades del suelo, para entender el momento crítico y mantener la humedad adecuada del suelo.

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