Evitar las obstrucciones de aspersores
Uno de los mayores problemas que se plantean en los sistemas de riego utilizados al mismo tiempo para aplicar fertilizante, son las obstrucciones de aspersores, de tuberías y filtros. Los aspersores tienen boquillas con pequeños diámetros de paso que pueden taponarse por la suciedad.
A lo largo de los años, se ha dado solución a esta situación gracias al uso de filtros que son cada vez más efectivos. Los emisores tienen un tamaño de paso mayor, hay tratamientos para agua de riego, sistemas de auto limpieza…
Tipos de obstrucciones
Aún con todo, sigue habiendo zonas con grandes problemas de obstrucciones de origen diverso:
- Obstrucciones físicas (partículas o sólidos en suspensión). Puede ser arcilla, limo, plástico, cascarilla, arena, etc. Se introduce en el sistema de riego durante la instalación o en las reparaciones y pueden atravesar los filtros y acumularse en los aspersores, taponando la salida del agua.
- Obstrucciones químicas (por precipitación de elementos químicos). Dependen tanto de la calidad del agua, como de los nutrientes y demás sustancias utilizadas. Se producen a partir de la precipitación de sales disueltas en el agua de riego, fundamentalmente al evaporarse el agua. Las precipitaciones más frecuentes son las producidas por los carbonatos que contiene el agua de riego, así como por el hierro y los fertilizantes.
- Obstrucciones biológicas (algas, bacterias, fauna). Las causan los organismos vivos que viven en el agua y se reproducen en el interior de las instalaciones por las condiciones ambientales. Traen como consecuencia la obturación de los aspersores y la propagación de enfermedades entre los cultivos. En estos casos, se debe implementar un sistema anti-algas que evite la reproducción de algas, de hongos y bacterias en los embalses.
También la existencia, por ejemplo, de mejillón cebra en las redes de riego.
Las estrategias de control empleadas hasta el momento han incluido la desecación de las balsas de riego, la inyección de sustancias químicas dentro de las tuberías de riego y el análisis de larvas.
Aunque los tratamientos con peróxido de hidrógeno o con cloro son letales, las inertes valvas del mejillón cebra circulan por las conducciones de agua sin control. El riesgo está en que en ausencia de drenajes apropiados, puedan causar muchos problemas al acumularse en los filtros y en los aspersores, impidiendo el funcionamiento normal de las instalaciones de riego.
Combinando medidas de presión y simulaciones hidráulicas, puede detectarse la presencia de mejillón cebra u otros elementos extraños en las tuberías (por diferencias de presión entre dos puntos).
Válvula de limpieza para evitar obstrucciones de aspersores
Para evitar los problemas de taponamiento y reducciones de presión, presentamos un producto novedoso y muy efectivo contra las obstrucciones por mejillón cebra y suciedad en el agua de riego. Esta válvula de limpieza de gran caudal en rosca 3/4” hembra, instalada en los finales de línea, limpia las tuberías evitando las obstrucciones de aspersores.
En el interior de la válvula hay un filtro para riego por aspersión con forma cilíndrica, fabricado en plástico de larga duración, con perforaciones de 2,5 mm en toda su longitud y con resalte de apoyo para mantener su posición inalterable. Este filtro impide la entrada de suciedad a la boquilla, al mismo tiempo que la válvula automática de gran caudal expulsa la suciedad y elementos sólidos que se encuentran en las tuberías en el inicio y en la finalización de la aplicación de riego. Trabaja cuando la presión en línea es inferior a 2 o 3 Bar (según el modelo). Y cierra automáticamente cuando la presión supera dichos límites, garantizando el riego perfecto y evitando cualquier obstrucción.