Agricultura y Riego
Podemos y deberíamos aprovechar todos los desechos urbanos, como la basura, los lodos de depuradoras, los restos vegetales, grasas animales, el aceite usado, etc… para obtener productos energéticos o químicos de utilidad para la sociedad o el campo y que además generen beneficios.
La camelina, que es muy resistente y puede recuperar zonas agrícolas de bajas productividades, es una alternativa de secano para la elaboración de piensos y no compite con el sector alimentario. Tanto si se destina a biocarburantes como a la elaboración de piensos.
Con los cultivos energéticos se puede reducir la contaminación y la dependencia del exterior; crean empleo, fijan la población rural, además de favorecer la actividad agrícola. Estos carburantes renovables se fabrican con combustibles comunes, que se transforman y preparan.
La jatrofa garantiza una producción de aceite superior al maíz y a la soja. Es el cultivo más rentable para obtener biodiesel, además, el aceite que se extrae pueden utilizarlo los motores diésel.
Los biocombustibles de segunda generación de origen vegetal como sustitutos del petróleo, prometen proporcionar una alternativa rentable para las explotaciones agrícolas. Su pretensión es disminuir el calentamiento global.