Mantenimiento agrícola
Las máquinas en general y las máquinas agrícolas en particular, sólo duran más y ofrecen un mayor rendimiento si se mantienen.
Resultan imprescindibles las revisiones periódicas, sustituir, engrasar y ajustar las diferentes piezas y componentes. Se deben utilizar correctamente, sin sobrecargarlas. Seguir bien las recomendaciones de los fabricantes.
Sólo un buen mantenimiento agrícola reducirá el tiempo de inactividad, evitando así las averías y gastos mayores.
En el medio agrícola el entorno es hostil, con unas condiciones desfavorables para la maquinaria: las temperaturas extremas, irregularidad en el terreno, agentes climatológicos, exceso de humedad y de polvo…
La importancia del mantenimiento agrícola
El uso continuado de los equipos cada campaña, genera un desgaste progresivo de sus componentes que inevitablemente, se traduce en un menor rendimiento que afecta a la producción. Si no se toman medidas, habrá averías que impedirán la continuidad del trabajo y originarán reparaciones costosas.
No hay que olvidar el riesgo de accidentes que supone una máquina mal atendida, elementos estropeados, fallos eléctricos, piezas sueltas…
Sin un mantenimiento preventivo se reduce la vida útil y habrá que reemplazar el equipo más rápidamente generando una nueva inversión evitable. Sin embargo, el mantenimiento agrícola continuado supondrá reparaciones sencillas, menos costosas, no interrumpe la producción y alarga la vida de la máquina.
Consejos generales de mantenimiento agrícola
- La acumulación de suciedad reduce el rendimiento de los filtros, ocasionando así desgaste en los elementos de la máquina y mayor consumo de combustible (en el caso de los filtros de aire) o de energía (en el caso de los filtros de agua de riego). Limpiezas periódicas de los sistemas de filtrado (aire o agua), reducirán los residuos que a la larga pueden provocar problemas.
- En motores, el nivel de aceite, la presión de aceite y el sistema de enfriamiento deben observarse a diario y cada mil horas de trabajo, para limpiar las boquillas de los inyectores.
- Después del trabajo, hay que limpiar y lavar las partes internas y externas, quitando residuos como: hojas, hierbas… y aplicar lubricante a las piezas metálicas. Esta labor es fundamental por ejemplo en los equipos de inyección de fertilizantes.
- Limpiar los radiadores de los motores para eliminar polvo e impurezas, esto mejorará su rendimiento.
- Cuando las máquinas se recojan, deberá hacerse en un lugar seco, bien ventilado, cubierto y sobre caballetes para evitar la deformación de los neumáticos.
- Los motores diésel deben arrancarse semanalmente y hacer funcionar el circuito hidráulico para así evitar oxidaciones e incrustaciones.
- Revisar lastres o contrapesos.
La periodicidad de los trabajos de mantenimiento en una máquina, dependerá de las condiciones de trabajo y de las horas de funcionamiento, del tipo de suelo, de la actividad que realiza la máquina… Por ejemplo, en un Pivot de riego no es igual que sólo riegue a que riegue y fertilice al mismo tiempo. En este último caso hay un mayor desgaste.
Factores a tener en cuenta en el mantenimiento del Pivot de riego
- Presión y estado de los neumáticos.
- Trenes de transmisión.
- Sistemas de alineación.
- Niveles de aceite de las cajas de engranajes.
- Sistemas eléctricos.
- Equipos de filtración.
- Puntos de engrase.
- Bombas de presión.
- Drenajes.
- Grupos electrógenos: flectores de trasmisión, niveles de fluidos (combustible, cárter, radiador)…
- Revisar y actualizar la carta de aspersión garantizará un buen riego y una mejor cosecha.
Es poco frecuente encontrar a escritores con conocimientos sobre este mundillo, pero creo que saben de lo que escriben. Gracias por compartir un artículo como este.