Compostaje para acabar con los residuos

Frente al constante aumento y acumulación de residuos en vertederos, el compostaje es una posible solución.

La basura orgánica se convierte en un producto capaz de enriquecer plantas y cosechas y de reducir la contaminación, con los residuos que se acumulan.

España genera más cantidad de basura que la media europea y recicla por contra un 40% menos. El resultado el 60% de los residuos acaba en los vertederos (la media de UE es del 42%). La producción de compost en España a partir de desechos biodegradables se mueve en la media de la Unión Europea (17%), pero está lejos de países como Austria, que alcanza el 38%. Las comunidades autónomas que más compostan son la valenciana y la cántabra.

El compostaje puede ser una alternativa ecológica y económica para reducir la cantidad de residuos orgánicos urbanos, agroforestales y ganaderos.

En lugar de llevar la basura al vertedero, los restos se van depositando en un contenedor denominado compostador. Los organismos del compostador realizan un proceso de descomposición aeróbica (con oxígeno) que va transformando la basura en compost. La materia resultante se puede aprovechar como complemento al abono en agricultura y jardinería, para controlar la erosión, mejorar la estructura de los suelos y recuperar los deteriorados, o para destruir organismos patógenos. El resultado se puede obtener con diversas técnicas: en activo o caliente, en pasivo o a temperatura ambiente, o mediante la utilización de lombrices rojas o de la familia Lumbricidae.

Instalaciones industriales de compostaje

Cada vez más plantas industriales utilizan este sistema para transformar la basura orgánica en varias aplicaciones ecológicas. El compostaje a gran escala ofrece gran cantidad de posibilidades. La ciudad estadounidense de Boston planea la construcción de una gran planta urbana que aprovecharía el metano generado en la descomposición del material orgánico y produciría electricidad para 1.500 hogares.

Iniciativas en España

Salamanca estrenó en junio una planta única por sus características. La instalación integra el compostaje de residuos vegetales en ciclo cerrado, la actividad de viveros y la investigación en laboratorio.

En Andalucía, la Consejería de Agricultura y Pesca concederá ayudas para la construcción de plantas de compostaje en las industrias alimentarias de la comunidad. Su objetivo es aumentar el aprovechamiento del alperujo, la pulpa de la fruta y otros subproductos de este sector.

En Murcia la empresa Cespa (filial del grupo Ferrovial) gestiona desde 2003 una planta de tratamiento de residuos sólidos urbanos con un sistema de compostaje en nave cerrada. La instalación tiene capacidad para reciclar 140.000 toneladas de lodos al año para convertirlos en abono, y utiliza biogás como energía. La inversión ascendió a 22 millones de euros, financiados por la UE.