Ricino, alternativa rentable
En la búsqueda de alternativas interesantes entre cultivos en auge y nuevas formas de agricultura, proponemos el cultivo del ricino, un producto que cada día está más demandado.
Las semillas de la planta del ricino son altamente tóxicas, debido a un alcaloide llamado ricina. Una vez purificado este aceite de su principio tóxico, es muy efectivo como purgante.
Actualmente este aceite tiene una gran demanda en sectores como: cosmética, energía, obtención de barnices, pinturas, lubricante, biodiésel, gomas, líquidos de freno, plásticos, textiles, detergentes biodegradables, alimentación…
Es también un aceite recomendado para tratamientos de esclerosis múltiple, la enfermedad de Párkinson, la parálisis cerebral, el reumatismo, la artritis, el estreñimiento…
Planta del ricino
La producción de la planta del ricino requiere realizar un estudio de la finca sobre luz y temperatura solar, humedad, nutrientes y labores a realizar, además de exigir una atención profesional muy concreta.
Dependiendo de las condiciones y medios de producción, el rendimiento de semillas en el cultivo de ricino puede oscilar entre los 500 y los 2.000 kilos por hectárea. La extracción de aceite puede ser de un 40-45% de las semillas recolectadas.
La planta del ricino tiene un tallo ramoso de color purpúreo, que puede alcanzar hasta 5 metros de altura. Sus hojas son grandes, con el limbo palmatipartido, de segmentos dentados y un largo pecíolo. Los racimos florales están compuestos de flores masculinas en la parte baja y flores femeninas en la parte superior. El fruto del ricino es globoso, erizado de púas y está compuesto de tres semillas grandes jaspeadas provistas de una excrecencia apical.
En los países templados, la producción de esta planta es anual, ya que muere con las heladas invernales. No es una planta muy exigente y admite varios tipos de terreno, pero los mejores lugares para su producción son los países tropicales. Aplicando medios técnicos se obtienen cosechas que reportan buenos dividendos.
Su ciclo de desarrollo es de cinco meses (entre 140 y 160 días).
El aceite que se obtiene de las semillas es un aceite vegetal de color amarillo pálido, sin olor ni un sabor concreto, perteneciente a los triglicéridos con ácidos ricinoleico, oleico y linoleico. El ácido ricinoelico tiene propiedades anti-inflamatorias, el ácido oleico es un omega 9 insaturado y el ácido linoleico es un omega 6 graso.
