Agricultura inteligente
Libelium, una empresa spin off que se fraguó en la Universidad de Zaragoza, ha recibido un premio internacional por su nuevo desarrollo sensorial inalámbrico para la agricultura de precisión.
Con esta tecnología se puede lograr una mayor precisión en los riegos, a través del control de hasta 14 parámetros ambientales diferentes en los cultivos.
Agricultura inteligente
Con esta placa sensorial agrícola y en general con las redes sensoriales inalámbricas, ahora es posible gestionar el cuidado de los cultivos y conocer las condiciones de crecimiento de las plantas de manera más precisa y desde casa (con un mínimo consumo de 0,7 microamperios de corriente en modo de hibernación). Incluso se puede medir la efectividad de la fertirrigación, las condiciones micro-climáticas o detectar sucesos meteorológicos adversos.
Este sistema de agricultura inteligente combina sensores de humedad, temperatura y luminosidad, se puede detectar el riesgo de heladas, las posibles enfermedades de las plantas o la necesidad de riego según el nivel de humedad de la tierra, entre otras cosas. Con ello se pueden controlar las condiciones de viveros e invernaderos, los parámetros de cultivos extensivos o intensivos en campo abierto, y monitorizar al detalle cultivos de alto rendimiento o delicados, como los viñedos o los frutos tropicales, donde el mínimo cambio en la climatología puede afectar al resultado final. Toda esta información puede ayudar también a determinar las condiciones óptimas de los cultivos, comparando las cifras obtenidas durante las mejores cosechas. Por su facilidad de instalación y escalabilidad, las redes de sensores inalámbricas pueden utilizarse también para monitorizar zonas aisladas de difícil acceso, como las zonas de crecimiento de hongos (champiñón, setas, trufas, etc.)
Sensores y control de parámetros
Listamos a continuación ejemplos de sensores y de parámetros que se pueden controlar:
- Temperatura del aire
- Humedad del aire
- Temperatura del suelo
- Humedad del suelo
- Humectación de hoja
- Presión atmosférica
- Radiación solar
- Luminosidad
- Diámetro de tronco/tallo/fruto
- Velocidad/dirección del viento
- Precipitación
- Gases.
El sistema va registrando valores del entorno, pudiendo almacenarlos y enviarlos a un centro de tratamiento de datos para su análisis o para programar alarmas de forma urgente. Por ejemplo, se pueden disparar avisos en caso de que sucedan eventos como lluvia torrencial o viento huracanado, o en función de la humedad de la tierra, enviar un mensaje (a través de la red o mediante un SMS) para detener el riego y así hacer una gestión eficiente del agua.
La interconexión permite que toda la información de la red sensorial pueda ser publicada en Internet o almacenada en bases de datos para un estudio posterior de la misma.
Control del crecimiento de los animales
Instalar una red sensorial inalámbrica cerca de los animales ayuda a optimizar sus condiciones de crianza. Es posible:
- Monitorizar la temperatura a la que se encuentran las crías para mantenerla en los niveles adecuados
- Medir los niveles de los gases producidos por el ganado como metano, amoniaco, y sulfuro de hidrógeno, producidos por vacas y cerdos
- Controlar el nivel de estrés de los animales monitorizando la agitación del rebaño con sensores de vibración y movimiento.
Hola, he estudiado Agronomía en Ecuador. Me interesaría recibir sus avances agrícolas, ya que pretendo profundizar en estas investigaciones. Gracias.
Estoy muy interesado en este tema de la agricultura inteligente y la nueva placa sensorial agrícola.
Muy buenas, me parece muy interesante su blog. Dado que es de la misma temática, aprovecho para recomendar a todos vuestros lectores nuestro blog de agricultura sobre el cultivo de tomate bajo plástico. Un saludo.
Interesante investigación. Me gustaría conocer más información técnica sobre las placas sensoriales. Saludos.