Cámaras de aire para ruedas agrícolas

Cada componente utilizado en las explotaciones agrícolas que tiene una relación directa con el suelo es de una importancia primordial para el éxito del trabajo en el campo. Los agricultores saben que las cámaras de aire de las ruedas agrícolas instaladas en su maquinaria son un aliado indispensable para el éxito de sus trabajos y exigen el mismo nivel de prestaciones que al resto de sus materiales con los que trabajan, seguridad, polivalencia, tranquilidad…

Con una mejor estanqueidad, un mayor grosor y una notable resistencia a los desgarros, las nuevas cámaras de aire fabricadas por Kleber para neumáticos agrícolas garantizan mejores registros de estabilidad y seguridad. Estas prestaciones se han conseguido utilizando la tecnología 100% butilo.

Estas cámaras cuentan con: un grosor de entre el 5% y el 34% más que otras opciones del mercado, una resistencia a los desgarros de entre un 44% y un 49% mejor, y una estanqueidad de entre un 18% y un 47% más que el resto de cámaras de aire.

Responden eficazmente a los usos agrícolas en general, ejes de tracción o de dirección, pivotes, tractores, cosechadoras…, permitiendo una mayor estabilidad, por ejemplo en la maquinaria vitícola, aseguran un buen lastrado que permite bajar el centro de gravedad y aumentar la estabilidad de la maquinaria que trabaja en las laderas de los viñedos.

El complemento ideal a una buena cámara de aire es un neumático gigante con buenos tacos y un buen diseño de pisada, que maximice el ancho de banda de rodadura, esto asegura la huella más amplia, proporcionando una distribución óptima de la presión y el máximo respeto por el suelo.

Una huella extra ancha a baja presión y un rendimiento de flotación inmejorable da como resultado una óptima distribución de la presión en el suelo para impulsar el rendimiento de los cultivos, preservándolo al mismo tiempo de la erosión y compactación.

Al realizar un montaje con cámara de aire en una rueda agrícola se debe utilizar una cámara nueva adaptada a la dimensión del neumático (en las cámaras figuran las dimensiones de neumáticos compatibles). No se debe montar una cámara de aire en una llanta deteriorada o reparada, tampoco en aquellas llantas cuyo acabado no permita el montaje de una cámara.

Las presiones de inflado deben regularse en función del tipo de rueda, la carga soportada y el tipo de trabajo a realizar (consultar las tablas de carga/presión), utilizando un circuito de aire comprimido equipado con un limitador de presión.

Una presión baja causa una deformación exagerada de la carcasa, e implica un deterioro prematuro del neumático. Una presión alta disminuye la superficie de contacto con el suelo, implica una pérdida de adherencia y hace que el neumático sea más sensible a los choques y a los cortes.