Filtro para aspersor
El riego por aspersión mediante cobertura es concebido para repartir el agua de riego de forma uniforme. Precisa aspersores de medio caudal que funcionen de una manera correcta con la presión existente, de manera constante, y que nunca queden obstruidos por piedras o residuos que puedan impedir su funcionamiento regular.
En las explotaciones agrícolas un cultivo regado por aspersión sobre un mismo tipo de suelo crece uniformemente y esta uniformidad puede apreciarse a simple vista. En la fase de crecimiento, una avería o mal funcionamiento de alguno de los aspersores instalados puede verse fácilmente y acceder a su reparación con prontitud, pero cuando el cultivo de porte alto está crecido, los aspersores ya no son visibles y resulta muy difícil apreciar si su funcionamiento es el correcto; si se producen obstrucciones de paso de agua es prácticamente imposible ser conscientes del problema y una o varias zonas pueden quedar sin el riego adecuado.
Generalmente las instalaciones de riego por aspersión suelen disponer de filtros de malla en cabecera para evitar la entrada de sólidos a la red de distribución. Si el agua de riego no está filtrada puede arrastrar piedras y suciedad que dificulten el buen funcionamiento de elementos de control importantes como electroválvulas y reguladores de presión, e incluso llegar a cegar las boquillas de los aspersores.
Si la boquilla del aspersor se obstruye no regará adecuadamente y aplicará menos agua y al reducir su presión de salida, no llegará al martillo distribuidor impidiendo que éste paletee normalmente. Dirigirá el agua en un mismo sentido y no realizará el giro completo, si se sedimentan residuos o se alojan piedrecillas en el mecanismo del aspersor éste no girará convenientemente y en suma, la zona que cubre dicho aspersor sufrirá un riego malo y deficiente. No resolver rápidamente estos problemas supone un descenso sensible de la producción.
Eliminar estos problemas de obstrucción en los aspersores de riego y reducir las labores en su mantenimiento es perfectamente posible gracias al filtro para aspersor, se coloca fácilmente en el interior de la caña, entre el aspersor (ya sea rosca macho o rosca hembra) y la caña porta aspersor; está fabricado en plástico de larga duración, es de forma cilíndrica con perforaciones en toda su longitud y dispone de un resalte en su cabeza que sirve de apoyo sobre el canto de la caña, manteniendo inalterable su posición.
Instalando el filtro para aspersor en todos y cada uno de ellos, se evita el paso de piedrecillas o sedimentos al aspersor de impacto, evitando su obstrucción y garantizando el correcto funcionamiento del sistema de riego por aspersión. Son muy aconsejables para instalar en los aspersores de final de línea, donde se acumula la suciedad arrastrada de las conducciones.
Necesitaba esta solución para los finales de línea y despreocuparme por si riegan o no los aspersores.