Sondas de humedad electrónicas y tensiómetros
Implementando métodos y sistemas para la monitorización y digitalización que minimicen el consumo de agua, se pueden llegar a aprovechar al máximo los recursos hídricos. Potenciando las producciones.
Detallaremos el método recomendado para implementar un sistema de monitorización:
- Recopilación de la información disponible. La digitalización comienza instalando una serie de sensores y dispositivos en todo tipo de máquinas o puntos estratégicos de la parcela para capturar, medir y transferir datos del entorno.
- Conexión de datos. Todos estos datos se conectan a las plataformas en la nube donde se guarda y procesa dicha información.
- Procesamiento de datos. Una vez almacenada la información en la nube, gracias a los servicios de software, los datos se identifican, clasifican, procesan y convierten en información útil y clara.
- Análisis de la información. El sistema, en su fase final, proporciona un análisis múltiple de los datos e interpreta en profundidad el entorno, los valores y las tendencias en tiempo real para poder actuar en consecuencia.
La dosis de riego dependerá de las exigencias de cada cultivo (por variedad, tamaño, densidad, superficie de sombreo, tipo de suelo…), de la evapotranspiración (que a su vez depende del clima de la zona, radiación, temperatura, viento…) y de las precipitaciones o lluvias.
Los sensores de humedad se instalan a diferentes alturas en el terreno de cultivo. Proporcionan información puntual fundamental del balance hídrico del suelo para el seguimiento de la producción. Humedad del bulbo, capacidad de campo, punto de marchitez…
Sondas de humedad electrónicas
Los tensiómetros y las sondas de humedad electrónicas son los dispositivos que miden la presencia de agua en el suelo.
Los tensiómetros miden en centíbares la presión con la que el agua está agarrada por el suelo. Las raíces tienen que superar esta tensión para extraer el agua. Dicha información se puede ver en el vacuómetro del tensiómetro y transferirla mediante cables y transductores de presión. De 0 a 10 centíbares hay exceso de agua, es decir, el suelo está saturado. De 10 a 20, sabemos que la humedad está a disposición de la planta con un mínimo de esfuerzo. Está asegurada una buena oxigenación de las raíces de 30 a 60. Y con 70 centíbares o más, la planta está padeciendo estrés y se acerca el punto de marchitamiento.
Las sondas de humedad electrónicas obtienen la medición de humedad del suelo de forma diferente. La obtienen a través de pulsos electromagnéticos y calculan el tiempo que tardan en regresar. Que siempre será proporcional a la permisividad del medio y al contenido de agua del suelo. Existen sondas de humedad electrónicas que transfieren la información mediante cables a un lector electrónico. También existen otras sondas electrónicas capacitivas más novedosas. Sus datos se descargan con el móvil utilizando una aplicación y conexión bluetooth, para después subirlos a la nube.
Diversas aplicaciones y programas intuitivos de fácil comprensión, facilitan el análisis y la interpretación de gráficos. Ayudando a determinar las actuaciones a seguir.
Gracias a estos sensores puedo conocer la situación de humedad del terreno en cualquier momento y gestionar bien el riego.